miércoles, 7 de noviembre de 2007

Desencializándonos

FRANK RODRÍGUEZ CÁRDENAS

Una de las tantas cuestiones planteadas al tema del lenguaje, es referente a la representaron de la realidad.
Es decir, ¿es el lenguaje, la única forma con el que podemos conocer la realidad? ¿o solamente son etiquetas con las que nos ayudamos a acceder la misma (la realidad), y lo que buscamos son sólo las esencias; es decir, lo real no es otra cosa más que esencias y el lenguaje etiqueta esas esencias, como si fuera un engrapador que atrapa un conjunto de hojas para así poder ver lo que hay.
Partamos primero, que sea cual fuere lo acertado, se impone el lenguaje como el único referente posible- o estable – con el que damos cuenta de lo real. Ahora bien, Quine [1] menciona, en su artículo, en el libro “DESDE UN PUNTO DE VISTA LOGICO”, que Aristóteles dice:


“Las cosas tienen esencia, pero solo las formas lingüísticas
tienen significación, y significación es aquello en que se
convierte la esencia cuando se separa de su objeto de
referencia y se adscribe de a la palabra”.



Es entonces el lenguaje, mas que una representación de la realidad, un mecanismo capaz de significarla. Con ello, la realidad no es otra cosa más que el resultado de nuestra interpretación, o como lo diría Nietzche [2]: “solo hay interpretaciones”; o como lo diría Ramón Trujillo [3]: “cada sujeto individual o colectivo fabrica su visión de mundo interpretando los datos de su experiencia de acuerdo con sus necesidades y apetencias”.
Por consiguiente, nos encontramos solo con interpretaciones del mundo, mas no con la realidad en sí del mundo. ¿Como podríamos argumentar esto? Lo haremos con palabras de Nietzche [4]:

“El pienso, luego existo, equivale a algo es pensado:
en consecuencia hay algo pensante, lo cual se sigue
que nuestra creencia de lo pensado es una substancia
de la que se puede predicar la existencia.

RAMON TRUJILLO [5] menciona que Nietzche quiere decir que:

“El que tenga que existir algo pensante, si algo es pensado,
no es más que una formulación de nuestra habitación
gramatical, la cual le pone un autor a un hacer[…] Nietzche
reduce la idea cartesiana a algo es pensado; en consecuencia
hay pensamientos, que según él, es una tautología con la que
se esquiva aquello que esta en cuestión, la realidad del
pensamiento, ya que esto solo confirma su carácter meramente
aparente[…] lo que Descartes quería – termina ,diciendo Nietzche –
era que el pensamiento tuviese no solo una realidad aparente, sino
una realidad en sí: Pero esa realidad no es más que algo que se
confunde con la vivencia del sujeto que piensa. Realidad y sujeto son
son inseparables[...]creo que Nietzche tiene toda la razón cuando
afirma que el concepto de realidad está tomado de nuestro sentimiento
del sujeto”.

Con esto queda ya casi sin argumentos la pregunta por las esencias de las cosas y el lenguaje como su etiquetado, es decir, no hay una sola manera de mirar el mundo, y en consecuencia tampoco hay una sola forma de conocimiento de cómo es el mundo. Con todo ello, podemos decir que hablamos sólo con palabras, y éstas solas o al combinarse forman pensamientos y esto es el lenguaje y es que el lenguaje por lo tanto, la que crea la realidad a la que tenemos acceso, y no son más que deformaciones, cuando se intenta aclarar lo que los objetos son, confundiéndolo con lo que el lenguaje, por medio de la palabra es.
con todo lo dicho, es el lenguaje solo una representación ( aunque ya hemos mencionado que el lenguaje más que representar significa) con el cual podemos figurarnos la realidad; al decir esto, pues, también limitamos el lenguaje, no es el lenguaje además de lo pensado por muchos -representación de la realidad- una descripción de la realidad, ya que al representarla es como un reemplazo o una abstracción de las cosas, en cambio al describirlas, es pues una descomposición de la descomposición de lo real, es presentado el lenguaje además como fraccionados y sintetizador de la realidad, con estos elementos, (significar la realidad, representarla y describirla). Se agrega y se nos une al grupo de cualidades o virtudes - que se yo -divinas, la capacidad de distinguir y diferenciar, aquellas preferencias que damos al significarlos representarlas y describirlas viendo anatómicamente, como un cuerpo humano, o mejor aún atómicamente como un químico.
Todo los estados de cosas posibles, como lo diría en su aforismo, este Wittgenstein[6], no es más una señal que con el lenguaje cubrimos toda la realidad, descubrimos la realidad con un telón lenguajista para nosotros, pero tan enredoso para nosotros como un laberinto sin salida habituado a él, inmersos en él, pero no capaces de poder ver ese gran laberinto desde afuera. O para ponerlo más lúdico, el lenguaje como lo diría filósofo austriaco [7]:

Nuestro lenguaje puede verse como una vieja cuidad;
una maraña de callejas y plazas, de viejas y nuevas
cosas, y de cosas con anhelos de diversos periodos, y todo
esto rodeado de un conjunto de barrios nuevos con calles
rectas y regulares y con casas uniformes.

Sin embargo, al decir todo esto nos hemos planteado -o nos ha brotado- un problema: el lenguaje que se da por medio de palabras, de oraciones, tienen significado y por lo tanto con ello accedemos al mundo, pero en que consiste el significado, o como lo diría wittgenstein, en “el cuaderno azul” [8]:


¿Qué es el significado de una palabra?- la pregunta,
produce en nosotros un espasmo mental, que nos
fuerza a responder diciendo, el significado de tal
o cual palabra, frase u oración consiste en eso o en
aquello.

Podemos hallar una respuesta en el libro de Juan Acero [9] que expresa:

El problema filosófico de cuál pueda ser la naturaleza de los significados es un pseudos-problema: aténgase UD. al uso o usos de las palabras, frases u oraciones que le atañen, porque- diría wittgenstein- eso es lo único que importa para comprender cómo es que un signo tiene vida; es decir, para comprender por qué la interpretación de un signo precisa de algo más que el mero signo aislado de los restantes mecanismos de la lengua a la que pertenece.

Es por consiguiente, clarificando más este punto en cuestión, muy importante el concepto de juego de lenguaje [10] en Wittgenstein:

No preocuparse por cuál pueda ser el significado
de una palabra, una frase u oración, sino por cómo
se usa tal palabra, frase u oración en el juego de
lenguaje que a uno le concierne.

Este famoso juego del lenguaje nos permite tener formas de lenguajes muy esquemáticos, simples y primitivos, que nos hacen considerar al lenguaje como completos en sí mismos o como lo diría Acero [11]: “como sistemas completos de comunicación humana”.
Sin embargo, hay que tener en cuenta la diversidad -o multiplicidad- de los juegos de lenguaje que jugamos.
Finalmente, y citando [12] nuevamente concluimos:

Si el significado(o significados) de una palabra es su uso en el(los)
juego(s) de lenguaje, saber qué actos del habla se llevan a cabo en
tales y cuáles sistemas de prácticas es saber cuál(es) es (son) su(s)
su(s) significado(s).[13]

Visto lo anterior, vemos como el lenguaje (mencionado anteriormente) lo cubre todo, lo acapara, pero ¿también lo oculta? Y con este problema que nos abortado nos saca un fruto muy llamativo, qué relación existe entre lenguaje y pensamiento, si lo que profiero no son mas que los pensamientos que tengo.
Para apoyarme en algo, me respaldare en lo dicho por Wittgenstein que compara al lenguaje como el ropaje externo del pensamiento [14], que no obstante este ropaje- suele suceder- oculta la forma del cuerpo, en ves de resaltarla.
Según Wittgenstein, la figura inmediata del mundo es el pensamiento y es en éste donde se forma una imagen mental del mundo además, como figura, es también el pensamiento un hecho y como una figura (a la que se le puede llamar o entender, como imagen, modelo, etc.) que uno se hace de los hechos son a la ves hechos y es deducible (según Wittgenstein) que si los hechos no pueden ser simples, tampoco las figuras pueden serlo. Por lo tanto, el pensamiento como figura es un hecho y al igual que el hecho tiene complejidad.
Ahora bien, el lenguaje es la totalidad de las proposiciones, puesto que las proposiciones son figuras de la realidad, de manera que el pensamiento se expresa a través de la proposición, es decir el pensamiento es la proposición con sentido. A esto Wittgenstein agrega el lenguaje sígnico, que describen estados de cosas posibles, y por ello, Wittgenstein [15] dice:

Al signo mediante el que expresamos el pensamiento
le llamo el signo preposicional y la proposición es signo
proposicional en su relación proyectiva al mundo.

El signo proposicional es pues, un hecho formado por palabras que están relacionadas de un modo determinado, es por ello que los elementos del signo proposicional, es decir, los signos simples, se corresponde con los objetos del pensamiento.
Es en consecuencia, el lenguaje una figura de la realidad, y sus proposiciones son figuras de los estados de cosas posibles [16], es decir, las proposiciones del lenguaje, dicen como son o como podrían ser las cosas en el mundo [17].
Con todo ello, se podría decir, como lo diría Humbolt, “EL MUNDO APARECE AL HUMANO YA ESTRUCTURADO POR SU LENGUAJE”. Esto nos remite y sigue aportando más a favor de l lenguaje que de la tesis esencialista, pues –como se argumenta- no existe un mundo donde se perciba objetivamente, o como diría Sapir;
“todo lo que se nos aparece, si es comprensible, lo es a través de las categorías de nuestro lenguaje, mediante las cuales clasificamos y asimilamos la experiencia” o mejor aún, “los limites de mi lenguaje significan los limites de mi mundo”[18]. Añado éste último, a los argumentos-verdugos- de las tesis esencialistas, porque según este aforismo Wittgensteniano, el mundo, es el mundo del lenguaje, y el lenguaje es mi lenguaje o el lenguaje de cada sujeto. Es así, como yo o el sujeto se constituye como condición de posibilidad y límite del mundo.
Es pues, el lenguaje una de las actividades de la historia natural del hombre, y solamente comprensible como entretejido con los demás.
¿Es con todo lo dicho, acaso el lenguaje, una forma de vida? Wittgenstein nos diría que, “imaginar un lenguaje supone imaginar una cultura” o en UNTERSUCHUNGEN [19] donde afirma que, “imaginar un lenguaje es imaginar una forma de vida”.
Por consiguiente, según nos clarifica Wittgestein, el fundamento del lenguaje son las formas de vida, es decir lo siguiente, si necesitamos obtener cualquier concepto, debemos obtener primero un conocimiento de la conducta humana, las actividades, las expresiones, todo aquello que envuelve las palabras para ese concepto. Con esto sentenciamos que, el lenguaje es una forma de vida y quien no conoce una forma de vida no puede comprender las (o sus) expresiones
lingüísticas, porque las determinadas expresiones lingüísticas implican una forma complicada de conducta y esta forma complicada de conducta se hace posible si y solamente si se sabe utilizar el lenguaje.
Es entonces, tomando la concepción del lenguaje como juego y como forma de vida, estas dos, suponen de tal modo, una precomprensión del mundo [20] articulada lingüísticamente. Porque ya sea comprensión o descripción, se dan ya en un juego de lenguaje y una forma de vida. Por lo tanto hay una primacía en la razón práctica.
Con lo dicho entonces, ¿qué pasa con la verdad? ¿Hay una diversidad de verdades?, nos ayudaría, nuevamente la metáfora de Wittgenstein que dice: “es como si los cimientos del edificio se apoyaran en el edificio entero” [21].

La verdad pues, no es una convención entre los hombres, pero si se entiende que la verdad pertenece a un juego de lenguaje; con ello se podría decir que el lenguaje no se fundamenta en la verdad. Es la verdad la que se pertenece a un juego de lenguaje, esto es, que no fundamenta en el(los) juego(s) de(l) lenguaje(S), porque la base de éstos no se encuentra(n) un conjunto(s) de juicio(s) o aseveración(es) evidente(s).
¿Y sobre la duda? [22], también pertenece a un juego de lenguaje, al igual que lo falso. La verdad pues, se fundamenta en la acción, y ésta (la acción) no es ni verdadera ni falsa.
Con todo esto, ¿se estaría llegando a un relativismo lingüístico? Es decir, si se da el caso, resultaría explicable la posibilidad de referirse a un mismo mundo desde aperturas lingüísticas diferentes. Pues no, a esto Wittgestein le da una respuesta inmediata;”los aires de familia”.los diversos-distintos- tipos de juegos afloran en ciertas semejanzas, así vemos unas semejanzas superponiéndose y entrecruzándose, que a veces pueden ser de conjunto y otras de detalle.
Wittgestein dice [23]:

“no puedo hallar una forma mejor de expresión para
caracterizar tales semejanzas que “aires de familia”
ya que los distintos parecidos existentes entre los
miembros de una familia… se superponen y
entrecruzan del mismo modo. Y diré que
“los juegos forman una familia”.

Es por lo tanto, que varios juegos del lenguaje no tienen una cosa en común, sino que forman una familia. Cito [24]:

Podemos extender nuestro concepto del lenguaje
Añadiendo he inventando nuevos juegos del lenguaje,
Al igual que al hilar trenzamos fibra con fibra y la fuerza
Del hilado no reside en el hecho de que una fibra recorra
Toda la longitud del hilado, sino en el entrecruzamiento
de varias fibras.

Así, debemos tener presente, que no existen ninguna forma lingüística de la realidad, simplemente porque cada forma lingüística es también una realidad, como lo diría Ramón Trujillo Cito [25]:

[…] no una realidad vicaria o sustitutiva, sino una realidad tan concreta como la que atribuimos a cada una de las cosas que nos rodean. La forma de la realidad es el conjunto de teorías que sostienen cada comunidad (es decir cada observador) acerca del mundo observado. Por el contrario la forma de una lengua no es una teoría sino la forma misma de nuestro conocimiento: la forma única en que todo el universo puede ser pensado […] solo podemos transmitir contenidos de conciencia, es decir, objetos que están en nuestra mente […] nos olvidamos de una única verdad incontestable: podemos transmitir las palabras pero no las cosas ni contenidos de conciencia.

Esta cita, nos conlleva a otro argumento [26]:

Hablamos sólo con palabras y son esas palabras las que crean
la única realidad a que tenemos acceso. Sólo la deformación
que introducen los lingüistas – o los aficionados y los pedantes-
(¿también estarían los filósofos?) cuando intentan aclarar
“lo que las cosas son”, confundiéndolo “con lo que las palabras son”.

No me fatigare en afirmar que el lenguaje, no es sólo un medio de expresión, sino también un medio de constitución del pensamiento, no sólo un medio de comunicar contenidos sino también de formar esos contenidos. Es por ello, que citaré a José Acero [27] donde afirma:

[…] dos formas de entender eso que llamamos lenguaje es la
de exteriorizar el pensamiento, la de ser el medio en el que
se hace pública la realidad subyacente en el pensamiento.
Según la otra, el lenguaje ha de situarse en el medio de los usos,
costumbres e instituciones humanas como algo inseparable de los
unos y los otros.

Es decir una concepción cartesiana del lenguaje y una concepción antropológica del lenguaje, es así como analiza el lenguaje Acero. Aunque yo me quedaría con la visión antropológica, este autor nos dice que tiene ambos análisis una convergencia, un punto en común(que no me explayaré) donde se atienden a aspectos del lenguaje como complementarios entre sí.
Dije que me quedaba con la visión antropológica, por un motivo simple, hace ver al lenguaje, lúdicamente, lo cual se comprende fácilmente y a la vez se la hace impenetrable, como que lo sabemos, lo sentimos nuestro, pero se nos hace tan misterioso como lo diría Wittgenstein [28]:

El lenguaje es un laberinto de caminos.
Vienes de un lado y sabes dónde andas,
Vienes de otro al mismo lugar y ya
No lo sabes.

Es así como se ve el lenguaje, como algo inseparable de nuestras conductas. Es el lenguaje tan complejo y tan dinámico que pone una gama de recursos que desempeñan funciones que difieren ampliamente unas de otras; o para mejor respaldo cito [29]:

“piensa en las herramientas de una caja de herramientas:
un martillo, unas tenazas, una sierra, un destornillador,
una regla, un tarro de cola, clavos y tornillos. – tan diversas
como las funciones de estos objetos son las funciones de las palabras.
(Y hay semejanzas aquí y allí).

Como se ha mencionado, el lenguaje tiene una resistencia a dejarse comprender y esto es por lo mencionado, la multiplicidad del lenguaje; sus múltiples herramientas lingüísticas y sus modos de uso y donde además esa multiplicidad no está dada para siempre sino que continuamente se renueva.
Es así como el lenguaje hace que los modos en utilizarla formen parte de nuestras formas de conducta y con esto hay que decir lo siguiente, que es erróneo pensar-o creer- que exista una esencia del lenguaje. Y como mencionábamos, no hay nada que compartan entre sí todos los juegos, si no que sólo tienen un parecido de familia. Por consiguiente no hay que pensar que el lenguaje es una manifestación de una esencia lingüística y que es la que el lenguaje cartesiano promueve.
Pero eso sí, el juego del lenguaje es un todo, formado por el lenguaje y las acciones con las que están entretejido.
Es gracias a este entretejido, que el uso del lenguaje llega a depender de las formas de vida de los hablantes, de esta manera podemos ver que la expresión que adquieren los significados son distintos cuando cambia el trasfondo de los hábitos culturales o de la propensión natural de los usuarios. Como diría Wittgenstein; sólo en la praxis de un lenguaje puede tener significado una palabra.
Pues a todo esto, volviendo a nuestro punto de partida, no existe la realidad en sí -y creo que no deberíamos esforzarnos en encontrarla- sino que es la realidad desde el punto de vista del sujeto o de una sociedad.
Es por ello que los argumentos esencialistas, donde intentamos llegar a una realidad en sí, esto es, que queremos llegar a la realidad por medio del lenguaje, siendo éste una herramienta que nos sirva para etiquetar, no es más que puro idealismo manejado por el mismo lenguaje, y tomare el titulo de un libro de RORTY [30]; “EL SER QUE PUEDE SER COMPRENDIDO ES LENGUAJE”, para decir que todo lo que podemos hacer –querer contemplar el bien, predicar algo, pedir, etc.- no es mas que lenguaje, de nuestro uso del lenguaje, todo lo que podemos decir y hacer es por el lenguaje, y fuera de ello todo es silencio.

Culminando este trabajo, citando nuevamente a Wttgenstein [31], queriendo señalar lo que el lenguaje es para todo sujeto, como algo que está en nosotros, pero que parece tan ajeno también, esta cita engloba lo que lo que significa el lenguaje y espero que se tenga en cuenta -impreso como un mensaje a la conciencia- de lo que es lo que he pretendido decir:
“hay de tener en presente que el juego de lenguaje es,
por decirlo de algún modo, algo imprevisible.
Quiero decir: no está fundamentado. No es razonable (ni irracional).
Esta allí- como nuestra vida”.



NOTAS



[1]Willard Van Orrman Quine, DESDE UN PUNTO DE VISTA LOGICO,
(DOS DOGMAS DEL EMPIRISMO), EDIT. Paidos, (Barcelona),
España, 1962.
[2] Cf. F.Nietzche, LA CREENCIA DEL YO. EL SUJETO, Archipiélago, 23, invierno de 1995, págs.88-93, fragmentos póstumos que publicaron con este título, la hermana de Nietzche y p. Gast.
[3] Ramón Trujillo, ALGUNAS DIDICULTADES TEORICAS DE LA NOCION DE SIGNIFICADO, UNIVERSIDAD DE LAGUNA, ESPAÑA, 2006.
[4] F.Nietzche, op.citp.
[5] ídem [3]
[6] TRACTATUS LOGICO-PHILOSOPHICUS, AFORISMO (2.06)
[7] L. Wittgenstein, INVESTIGACIONES FILOSOFICAS – 18.
[8] L. Wittgenstein, CUADERNOS AZUL Y MARRON, TECNOS, MADRID, 2001.
[9] Juan José Acero, INTRODUCCION A LA FILOSOFIA DEL LENGUAJE, Madrid, ediciones cátedra, 2001.
[10] Saludar, preguntar, confirmar, son juegos del lenguaje, es decir, utilizamos las palabras para llevar a cabo ciertas acciones (o jugadas) en el juego del lenguaje correspondientes.
O como lo diría Abugattas, “si aceptamos que el uso es el significado de las palabras y que explicar a alguien un significado es por lo tanto, entrenarlo a jugar con un signo de determinadas maneras[…]” y las formulaciones para explicar el uso las llama “reglas” y estas describen el uso del lenguaje.
[11] Juan José Acero, INTRODUCCION A LA FILOSOFIA DEL LENGUAJE, Madrid, ediciones cátedra, 2001.
[12] Juan José Acero, INTRODUCCION A LA FILOSOFIA DEL LENGUAJE, Madrid, ediciones cátedra, 2001.
[13] Este motivo es por el cual, wittgenstein plantea los aires de familia.
[14] TRACTATUS LOGICO-PHILOSOHICUS (4.002)
[15] TRACTATUS LOGICO-PHILOSOHICUS (3.12)
[16] Los estados de cosas es una conexión de objetos (cosas). (2.01)
El objeto es simple. (2.02)
[17] Debemos tener en cuenta que las proposiciones tienen sentido en la medida que son figuras de la realidad, es decir, debe de tener correlación con la figura, en consecuencia, éstas (las proposiciones) son hechos que representan – según Wittgenstein- cómo están o estarían los objetos colocados en el mundo.
[18] tractatus lógico-philosophicus (5.6)
[19] Philosophische untersuchungen (Investigaciones filosóficas), edit. Barcelona (España), 2004, págs.19.
[20] nótese, que esa precomprensión del mundo que supone la instalación de todo lenguaje en una forma de vida, no es una precomprensión teórica, sino práctica. Porque como lo diría Habermas, “la razón práctica se hace universal dado que es identificación del lenguaje” y la forma de identificación del lenguaje y la forma de vida.
[21] L.W. SOBRE LA CERTEZA, Gediza, Barcelona, 1997; págs.248.
[22] Wittgenstein dice: que si intentas dudar de todo, no dudas de nada: el juego mismo de la duda presupone una certeza (“op.citp. -23-págs115) y se relaciona con la siguiente: ¿no se necesitan fundamentos para la duda? (“op.citp. -23-págs122).
[23] I.F op.citp. Págs.66-67
[24] I.F op.citp. Págs. 67.
[25] Ramón Trujillo, ALGUNAS DIDICULTADES TEORICAS DE LA NOCION DE SIGNIFICADO, UNIVERSIDAD DE LAGUNA, ESPAÑA, 2006.
[26] op.citp.-[25]
[27] José Acero, LENGUAJE Y FILOSOFÍA, Octaedro, Barcelona, 1993.
[28] I.F. op.citp.-203.
[29] I.F. op.citp.-11.
[30] R. Rorty, EL SER QUE PUEDE SER COMPRENDIDO, ES LENGUAJE. Homenaje a Hans-Georg Gadamer. Síntesis, (Madrid), España, 2003.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

desencializemonos es un articulo muy intreresante, me parece que lo has analisado muy bien y esta muy bien estructurado,espero seguir leyendo tus articulos edson Rodriguez y que sigas siendo analitico.

Anónimo dijo...

este artículo me parece aveces convencerme pero en algunas cosas me deja la sensacion de tener vacios muy desconcertantes, deberías ajustarlo un poquito más, creo que es un articulo diferente ,me gusta...ojala te atrevas pues a explicarlo algun dia,a ver si puedes convencer en lo que dices ...